“Panamá defiende su política migratoria en Darién ante críticas”

La declaración del ministro de Seguridad, Juan Manuel Pino, resalta el compromiso de Panamá en abordar el flujo migratorio irregular a través del Darién de manera responsable, destacando la implementación de pruebas biométricas para detectar posibles amenazas como terroristas y violadores. Además, enfatiza que Panamá no es un paso libre y que se vela por la seguridad de la región mientras se respetan los derechos humanos de los migrantes.

La directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine, rechaza un informe presentado por Human Rights Watch, argumentando que no refleja la realidad y sugiere que tiene motivos ocultos. Gozaine proporciona estadísticas que muestran la magnitud del flujo migratorio en la región del Darién y menciona la presencia de numerosas organizaciones no gubernamentales en el área, negando los relatos descritos en el informe.

Por su parte, el director de Senafront, Jorge Luis Gobea, destaca los esfuerzos para desmantelar campamentos y detener a individuos implicados en actividades delictivas como robo, violaciones y tráfico humano en el área de Darién y Guna Yala.

El Fiscal Emeldo Márquez explica el compromiso del Estado panameño en brindar acceso a la justicia a todos los individuos, incluidos los migrantes, con la presencia de personal del Ministerio Público en comunidades receptoras y centros de recepción migratoria en el Darién, trabajando en colaboración con otras agencias para abordar cualquier actividad delictiva que ocurra en la región.